La ANC visita el Parlamento Europeo y el Parlamento de Flandes para denunciar la vulneración de derechos humanos en el Estado español

El Presidente de la mesa del Parlamento de Flandes, Jan Peumans, aseguró que el Gobierno español «es incapaz de cumplir las condiciones para formar parte de una Europa democrática» y que la violencia del referéndum del 1-O fue la expresión de una política «antidemocrática».

La presidenta de la Assemblea Nacional Catalana (ANC), Elisenda Paluzie, visitó ayer Bruselas para denunciar de nuevo las violaciones de los derechos humanos perpetradas por el Estado español: por la mañana, en una conferencia organizada en el Parlamento Europeo; y posteriormente, en el Parlamento de Flandes, en la inauguración de una exposición fotográfica, junto al presidente de la mesa de la Institución, Jan Peumans, y el presidente Puigdemont.

La conferencia, bajo el título «The right to self-determination: finding ways to advance within the EU framework», organizada en el Parlamento Europeo por eurodiputados catalanes y bascos, con la colaboración de la UNPO, del grup parlamentario europeo de Los Verdes/EFA, la Alde, la European United Left i la EU-Catalonia Dialogue Platform, contó con la presencia de diversos eurodiputados, como Josep-Maria Terricabras, Ramon Tremosa, Jordi Solé, Ana Miranda, Izaskun Bilbao, Ivo Vajgl, Mario Brghezio y Jill Evans.

La presidenta de la ANC afirmó que, si el Estado español no reconoce el derecho de autodeterminación de Cataluña, está vulnerando y violando de manera «flagrante» los tratados internacionales que ha ratificado.

Convertir un dret en un delicte
Paluzie recordó que los referéndums han sido el mecanismo para el ejercicio de la autodeterminación, y que, en el caso catalán, el Estado español ha ejercido la fuerza contra la población civil, que intentaba ejercer este derecho, violando claramente derechos del Pacto Internacional de derechos civiles y políticos, que contemplan el derecho a la libertado de expresión, de asociación y de participación en los asuntos públicos.

Pero además, recordó Paluzie, el Estado ha ido «un paso más allá» con el encarcelamiento de dirigentes políticos y de asociaciones de la sociedad civil, acusándolos de «delitos inventados», como el de rebelión, por haber ayudado a preparar un referéndum que, si el Estado español respetara sus obligaciones constitucionales e internacionales, tendría que haber sido reconocido «completamente legal» y legítimo, y no acabar convirtiendo un derecho en un delito, como han hecho.

Para acabar, Paluzie hizo un llamamiento a la Unión Europea para que busque una respuesta coherente al derecho de autodeterminación: si en los años 90 se le dio una respuesta con la independencia de los países bálticos, hoy Cataluña sólo encuentra silencio ante la «violación» de derechos humanos perpetrada por el Estado español.

Peumans cuestiona el papel del Gobierno español
Posteriormente, Paluzie participó en la inauguración de la exposición «De Stembusrevolutie» («La revuelta de las urnas»), en el Parlamento de Flandes.

En el discurso de inauguración, Jan Peumans recordó las palabras que escribió a la expresidenta del Parlamento catalán, Carme Forcadell, en que le aseguraba que el Gobierno español «es incapaz de cumplir las condiciones para formar parte de una Europa democrática» y que la violencia del referéndum del 1-O fue la expresión de una política «anti-democrática». Así, considera «inadmisible» que esté encarcelada por haber intentado ejercer un derecho democratic.

En esta misma línea, el Presidente Carles Puigdemont, que también asistió, recordó que el juez Llarena, que ha instruido la causa contra los presos políticos y los exiliados, lleva mucho tiempo intentando interferir en el funcionamiento del Parlamento de Cataluña.

También estuvieron presentes Bernard Daelemans (miembro activo del VVB y de ICEC Vlaanderen), Pere Jordi Junqué (de la ANC Bruselas) y el diputado Jan Van Esbroeck (N-VA).

La revuelta de las urnas
Como explicó Carles B. Gorbs, la exposición intenta mostrar y clarificar «una revuelta pacífica y democrática», y hace un seguimiento del proceso soberanista de Cataluña, desde su inicio en 2009 (el 13 de septiembre, con la consulta en Arenys de Munt) hasta la actualidad –pasando por fechas tan señaladas como los diversos 11 de septiembre, en que millones de personas salieron a la calle para pedir la independencia de Cataluña–, y que culmina en el referéndum de autodeterminación del uno de octubre de 2017.

La exposición se podrá ver hasta el 20 de octubre en la «Zuilenzaal» del Parlamento de Flandes.